POR: LINA ALEJANDRA URIBE HENAO
El 25 de junio de 2008, la vida de aproximadamente 3000 personas cambió completa y radicalmente. El motivo fue el abrupto cierre del basurero de Navarro, que, aunque favoreció el cuidado ambiental, tiró al olvido a las personas que durante años habían vivido de la basura y encontraban en ésta su única posibilidad de subsistencia.
Después del cierre de Navarro había muchos recicladores en busca de muy poca basura. Al parecer a la mayoría del pueblo no le importaba la situación, incluso las entidades encargadas de imponer el orden e igualdad social quisieron aliviar el gran problema con “paños de agua tibia”.
Afortunadamente los recuperadores lograron agruparse y, con representantes que hicieron un buen uso de las leyes, consiguieron llegar a un acuerdo con el gobierno municipal que garantiza su reorganización e inclusión social. Además los pactos logrados aseguran que los antiguos recicladores van a gozar de una serie de beneficios nunca antes pensados. El conjunto del arduo proceso y los logros alcanzados por estas personas a veces muy mal llamadas “indigentes", se ha convertido en un ejemplo para la comunidad.
Otra causa por la que los recicladores fueron “tirados a la caneca” fue que empresas privadas se estaban encargando de darle un tratamiento integral a los residuos de las grandes empresas. Un reciclador se levantaba aproximadamente a las 4:30 am, preparaba algo de comida para sus hijos, hacía los oficios de la casa y salía a recorrer las calles de la ciudad en busca de papel, cartón y plásticos, que en horas de la tarde llevaba a una bodega y vendía a un muy bajo costo; todo para no morir de hambre. Al otro lado de la cuidad, un empresario se levanta a las 6:00am y mientras le grita a su empleada que le sirva el desayuno, hace algunas llamadas a los dirigentes de las grandes industrias para pedir una cita y ofrecer un nuevo plan de tratamiento integral a los residuos sólidos.
El empresario no muere de hambre si no pacta un contrato, pero el reciclador sí perece al no tener ningún material que pueda vender para comprar alimentos. Aunque la situación parezca exagerada, es una breve ilustración de una situación vivida hace poco por cientos de familias recicladoras. Y claro, es entendible que se le dé mucha mas prioridad a los intereses de unos encorbatados (quienes detrás de un libro de leyes esconden toda su insensibilidad), que a los de una persona humildemente vestida que va a poner la cara en nombre de su familia y compañeros, exigiendo un trabajo, una vivienda y un salario.
La insensibilidad del pueblo es otro factor en contra de los humildes recicladores; esto pudo comprobarse con un sondeo de opinión realizado en la PUJ, el cual arrojó como resultado que la mayoría de los estudiantes ignoraban por completo la situación vivida por los recicladores e incluso aceptaron que en sus casas no se tomaban la molestia de clasificar las basuras antes de sacarlas.
El concejal del Polo Democrático Fabio Alonso Arroyave dio una opinión muy acertada sobre la exclusión de los recicladores; expresó que la solución era incluirlos en la cadena del reciclaje y crear políticas en donde todos salieran favorecidos (2008). Al parecer, las propuestas de inclusión social no sonaban muy llamativas al bolsillo de los nuevos empresarios disponentes del reciclaje que se estaban lucrando mientras dejaban con hambre a gran parte de la población. Y como si fuera poco, en diciembre de 2008 apareció una ley que consideraba infractores a todos aquellos que esculcaran las bolsas de basura una vez puestas para su recolección (Colombia, 2008, Art. 7). Es curioso que cuando la empresa de los hijos del primer mandatario está cogiendo vuelo, aparezca una ley que elimine completamente a sus contrincantes, lástima que en los asuntos estatales estas incongruencias no sean tenidas en cuenta.
Lo que el pueblo ignoraba era que detrás de las leyes manipuladas y esa gran cantidad de intereses políticos de por medio se encontraban los humildes recicladores esperando una respuesta y un nuevo proyecto para que no tuvieran que seguir realizando su labor clandestinamente. Antes los únicos que se interesaban en la basura eran los recuperadores porque no tenían otra alternativa de vida. Ahora los grandes empresarios descubrieron esa “mina de oro” y quieren apoderársela a como dé lugar.
Después de demandas, protestas y comités parece que todo ha llegado a su fin y que ahora sí los recicladores van a ser reconocidos como lo que verdaderamente son: empresarios del reciclaje. Adriana Ruiz, la abogada caleña que ha llevado todo el proceso, comentó a El Tiempo sobre la más reciente situación de los recicladores caleños. Expresó que ellos ya son reconocidos como empresarios jurídicamente, sólo les falta llenar el título aprendiendo a tener mayor gestión, proyección y confianza. La nueva tarea es educar a la comunidad (2009).
Adriana Molina, representante de la Fundación Recuperadores por Cali expresó que ya la Alcaldía está empezando a cumplir sus propuestas, que van a abrir puntos de encuentro para que todos los recuperadores lleven el material y además les van a pagar el acarreo. También van a recibir un subsidio de vivienda. Lo único que ella le ruega a Dios es que todas las promesas sean cumplidas (2009).
En conclusión, han sido muchos los avances que se han visto en cuanto a la situación de los recicladores, ahora lo único que se espera es que el gobierno y todas las entidades que han ofrecido su ayuda cumplan con lo prometido, al fin y al cabo estas personas no están haciendo más que un bien ambiental que al mismo tiempo les sirve para poder sobrevivir en este mundo en el que los intereses personales están primero que todo.
REFERENCIAS
Arroyave, F. (2008), “Quieren sacar a los recicladores para quedarse con el negocio!”, [en línea], disponible en http://www.polodemocratico.net/Quieren-sacar-a-los-recicladores,4693, recuperado: 17 de noviembre de 2009.
Colombia, Congreso Nacional de la República (2008, 19 de diciembre), “Ley 1259 de 2009, por medio de la cual se instaura en el territorio nacional la aplicación del comparendo ambiental a los infractores de las normas de aseo, limpieza y recolección de escombros; y se dictan otras disposiciones”, en Diario Oficial, núm. 47.208, 19 de diciembre de 2008, Bogotá.
El Tiempo (2009), “Adriana Ruiz-Restrepo dice que entidades y recicladores de Cali lograron un lenguaje común”, [en línea], disponible en http://www.eltiempo.com/colombia/occidente/adriana-ruiz-restrepo-dice-que-entidades-y-recicladores-de-cali-lograron-un-lenguaje-comun_6320807-1, recuperado: 17 de noviembre de 2009.
Molina, A. (2009, 3 de octubre), entrevistada por Uribe Henao, L. A., Cali.
viernes, 27 de noviembre de 2009
sábado, 14 de noviembre de 2009
VOLANDO CON ALAS ROTAS
POR: LINA ALEJANDRA URIBE HENAO
Se dice que en el mundo actual, gracias a los avances tecnológicos, la información tiene alas. Fácilmente desde el sillón de nuestra sala en frente del televisor podemos enterarnos de lo que ocurre al otro lado del mundo, lo curioso es que en medio de tanta información circulante la que realmente nos afecta por su cercanía o nos compromete como personas está siendo dejada en un segundo o quizás tercer plano.
Un ejemplo lo podemos encontrar en la PUJ en donde los estudiantes desconocen casi totalmente una situación que tal vez no los afecta directamente pero sí les incumbe como ciudadanos o simplemente como seres humanos. Se trata de la problemática desencadenada por el cierre del basuro de Navarro y el nuevo manejo de las basuras. Es increíble saber que los estudiantes con mayor carencia de información y errores de argumentación y coherencia son los de Derecho, incluso cuando se les preguntaba sobre una ley.
La falta de información genera un mínimo sentido crítico y cierra todas las posibilidades de sensibilización y acción ante una determinada situación. Estudiantes que desde ahora no estén enterados y generen opiniones sobre lo que acontece a sus alrededores no muestran un futuro prometedor, más aun si se están preparando para más adelante imponer las leyes en un país.
En fin, parece la que “las alas de la información” se encuentran rotas porque no están llevando a cabo integralmente su labor. Un pueblo desinformado es un pueblo dominado y si esto se está dando ahora en los jóvenes, ¿qué será del futuro de nuestro país?
Un ejemplo lo podemos encontrar en la PUJ en donde los estudiantes desconocen casi totalmente una situación que tal vez no los afecta directamente pero sí les incumbe como ciudadanos o simplemente como seres humanos. Se trata de la problemática desencadenada por el cierre del basuro de Navarro y el nuevo manejo de las basuras. Es increíble saber que los estudiantes con mayor carencia de información y errores de argumentación y coherencia son los de Derecho, incluso cuando se les preguntaba sobre una ley.
La falta de información genera un mínimo sentido crítico y cierra todas las posibilidades de sensibilización y acción ante una determinada situación. Estudiantes que desde ahora no estén enterados y generen opiniones sobre lo que acontece a sus alrededores no muestran un futuro prometedor, más aun si se están preparando para más adelante imponer las leyes en un país.
En fin, parece la que “las alas de la información” se encuentran rotas porque no están llevando a cabo integralmente su labor. Un pueblo desinformado es un pueblo dominado y si esto se está dando ahora en los jóvenes, ¿qué será del futuro de nuestro país?
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